ESTRASBURGO 21 DE JULIO DE 2015 (La Silla Rota).- Fueron hallados en frascos restos de 86 víctimas ligadas a un proyecto de colección de esqueletos judíos, de la anatomista nazi August Hirt, en el Instituto de Medicina Forense de Estrasburgo, informaron fuentes ligadas a una investigación.
El hallazgo de los restos conservados en probetas y frascos fue hecho el 9 de julio por el historiador Raphael Toledano, autor del documental “El hombre de los 86”, pero sólo fue dado a conocer este domingo por decisión de las autoridades.
Los restos encontrados pertenecen a varias de las 86 víctimas de un proyecto de colección de esqueletos judíos que quería completar el anatomista nazi Hirt.
Con apoyo del director del Instituto de Medicina Forense de Estrasburgo, Jean-Sébastien Raul, el historiador Toledano logró identificar varias piezas, entre ellas un frasco con fragmentos de piel de una víctima de las cámaras de gas.
De igual forma, encontró dos probetas con el intestino y el estómago de una víctima, así como objetos usados durante la incineración de cuerpos en el campo de concentración alsaciano de Natzweiler-Struthof.
Casi todos los restos fueron cortados en trozos, y fueron hallados luego de la liberación de Estrasburgo por los aliados en 1944, rápidamente inhumados en un cementerio judío.
Los investigadores del instituto forense ignoraban la existencia de estos restos, que conforme a una decisión del ayuntamiento de la ciudad, serán entregados a la comunidad judía local, indicó la emisora Radio Francia Internacional.
En el marco de una investigación sobre los crímenes del doctor Hirt, los fragmentos hallados ahora forman parte de los elementos conservados por el profesor de medicina forense de la Facultad de Medicina de Estrasburgo, Camille Simonin.
Por lo que las autoridades militares encargaron a Simonin las autopsias, para determinar las condiciones que condujeron a la muerte de las víctimas.
Durante sus investigaciones, una carta de Hirt fechada en 1952 dio pista de los restos al historiador Toledano.
En la misiva, el anatomista nazi refiere la existencia de frascos con muestras tomadas durante las autopsias practicadas a las víctimas judías de la cámara de gas de Struthof.