China 13 de marzo de 2015 (lasillarota.com).- En el floreciente mercado de imitaciones de China, ya se venden productos pirata como el reloj inteligente de Apple.

"Apple Smart Watch con pulsera Bluetooth'', anuncia un vendedor en la popular página de comercio electrónico Taobao, propiedad del grupo Alibaba.

El famoso reloj se comercializa por 288 yuanes (45 dólares, una octava parte de los 349 dólares que valdrá la versión más barata del original); imágenes en la página del vendedor parecen ser las de Apple Watch real y enumera las características de la versión china, que incluye servicio de mensajería de texto y reproductor de música.

Alibaba, que desde el año pasado cotiza en la Bolsa de Nueva York tras un arranque récord, enfrentó críticas en el pasado por tener productos falsificados a la venta. La firma dice que ha estado adoptando medidas para reducir el problema.

La enorme cantidad de copias del reloj inteligente refleja la mezcla de fabricantes de electrónica calificados y el creciente mercado de clientes para productos baratos que confluyen en China.

A pesar de que la mayoría de las computadoras personales y celulares del mundo se ensambla en China, las empresas nacionales todavía están empezando a desarrollar sus capacidades para diseñar y crear productos innovadores.

Esto ha llevado al auge de una industria conocida como "shanzhai'' ("fortaleza"): cientos de pequeños fabricantes anónimos que copian rápidamente el diseño o las características de celulares extranjeros y otros productos que venden por una parte de su precio original.

Al menos ocho vendedores en Taobao anuncian relojes como "Apple Watch'' o "imitación de Apple Watch''. La mayoría dicen ser compatibles con el sistema operativo iOS de Apple o con su rival, Android, de Google.

Por su parte Apple, con sede en Cupertino, California, dijo que los compradores de China y Hong Kong pueden reservar su reloj a partir del 10 de abril, el mismo día en que empezará a recibir pedidos en Estados Unidos, Japón, Gran Bretaña, Francia y Alemania.

La mayoría de los productos anteriores de Apple se comercializaba en el gigante asiático semanas o meses después que en otros mercados.

Esto alimentó el contrabando de iPhones entre aficionados a la tecnología dispuestos a pagar un poco más.

Según el periódico The South China Morning Post, de Hong Kong, las imitaciones de Apple se venden también en mercados en la ciudad sureña de Shenzhen, "el mejor lugar del continente para comprar... copias de alta tecnología''.