TIJUANA BC 25 DE SEPTIEMBRE DE 2015.- La primera mujer en cantar con un mariachi fue Lucha Reyes, ese es el postulado de la investigadora Laura Velasco quien ofrecerá una conferencia sobre la pionera de la música bravía como parte del Ciclo México a través de la cultura el próximo miércoles 30, a las 19:00 horas en la Sala Carlos Monsiváis del Centro Cultural Tijuana.
Lucha Reyes La Tequilera es el título de la conferencia que impartirá Velasco, quien es egresada del Conservatorio Nacional de Música, investigadora de la música y las canciones de México relacionadas con acontecimientos históricos; es también Licenciada en Letras Hispánicas por la Universidad Nacional Autónoma de México.
En 1919 año del asesinato de Emiliano Zapata y muerte del poeta Amado Nervo, Lucha Reyes debutó en las carpas a la edad de 13 años, quizá por ingresar al mundo del espectáculo siendo una niña se labró una fama de marginal y autodestructiva, su interpretación de la ahora clásica ¡Ay Jalisco no te rajes! la llevó a la gran pantalla en la cinta homónima al lado de Jorge Negrete y Gloria Marín en 1941.
Su personificación de una cantante que evocaba a las Adelitas revolucionarias, le valió un espacio en Estados Unidos y en Alemania donde tuvo numerosas presentaciones; su vida fue marcada por un signo trágico que la llevó al suicidio. La intérprete de Por un amor, daría paso a un mito como la primera cantante de rancheras que bebía en el escenario.
Buena parte de la conferencia estará asociada con el libro escrito por Velasco, Me llaman la tequilera, una investigación que llevó 18 años, con testimonios de familiares sobrevivientes y complementada con una amplia hemerografía, una búsqueda fotográfica y el cotejo de diversos de archivos sonoros.
Laura Velasco es autora también de Juguetero de poesía y Mi primer diccionario de flora de México que le valieron el Premio Nacional de Traducción de poesía del INBA; y el Premio Nacional de Poesía para Niños Narciso Mendoza respectivamente.
La entrada para esta conferencia es libre y sujeta a la capacidad de la Sala.
