AFN POLÍTICO

*- Los intentos de desmentidos
*.- Inusitada reacción del PAN

DORA ELENA CORTÉS
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TIJUANA BC 18 DE ABRIL DE 2017 (AFN).- No es de ninguna manera “hacer leña del árbol caído” ni tampoco se trata de ninguna campaña contra el ayuntamiento local como algunos han pretendido hacer creer, sino que la actuación del ahora director de Asuntos Internos de la sindicatura Procuradora, Jorge Agraz Fitch, verdaderamente es reprobable y no puede quedar simplemente en una “renuncia voluntaria” a través de Facebook y con la simple promesa o anuncio de su ex jefa Ana Marcela Guzmán Valverde en el sentido de que abrirán una investigación.

Con la misma firmeza con la que la dama inhabilitó al teniente coronel Julián Leyzaola Pérez, ex candidato a la alcaldía por el Partido Encuentro Social (Pes) y pretende hacerlo también con el ex Secretario General de gobierno del ayuntamiento de Jorge Astiazarán Orcí, el abogado Carlos Mejía López, así debe hacerlo también con este ex colaborador. Y no sólo lo debe investigar a él, sino también al director de reglamentos Luis Antonio Carreiro Galaviz, y a sus “muchachitos”, atendiendo el señalamiento que ayer hizo el general comandante de la zona militar, Enrique Martínez López.

De hecho, para este miércoles el ex secretario Carlos Mejía López fue convocado para una segunda audiencia en la sindicatura, y la titular de esa oficina hasta el momento no nos ha dicho para cuándo ha convocado a Agraz Fitch, ni tampoco ha sido muy firme para decirnos que no permitirá de ninguna manera este tipo de conductas vergonzosas, sino que al contrario se escondió desde el mismo momento en que apareció esa grabación y ni ayer dio la cara, sino que envió un boletín en el que más bien parecía que trataba de justificar al exfuncionario, al que ni siquiera se atrevió a mencionar por su nombre.

Al margen de explicaciones legales como las que ayer dieron tanto ella como el presidente municipal, se requiere de posiciones firmes, de ambos, como dos de los ediles más importantes de esta administración, que tienen la obligación de no solamente garantizar, sino de demostrar con hechos que no serán condescendientes con los corruptos.

Otros sectores y partidos, incluido el mismo PAN -sobre el que ya hablaremos- han demandado que no sólo se abra esa investigación, sino que se turne, como debe ser, ante las autoridades competentes, en este caso  la Procuraduría de Justicia del Estado, como bien saben el alcalde y la síndico, en su calidad de abogados, que se debe de hacer.

No necesitan llegar a la conclusión de que este hombre es culpable, porque eso lo determinarán en la investigación interna que para cuestiones administrativas hagan, sino que como autoridades de esta ciudad, tienen la obligación de presentar la denuncia penal al tener conocimiento de la probable comisión de un ilícito, sobre todo después de que el mismo alcalde dijo haber reconocido la voz de este ex colaborador.

Lo malo es que esto que hizo Agraz, no se trató de un “primerizo” intento de extorsión, porque han surgido comentarios de otros comerciantes en el sentido de que pasaron por experiencias similares, y por si esto no fuera suficiente, menudearon las historias sobre la conducta indebida de este joven en algunos lugares en los que aprovechando su posición y nombre, no pagó algunas cuentas o escandalizó alcoholizado como ocurrió hace poco más de un mes en el restaurante Saverios de la Zona Río de Tijuana.

De esto último hay muchos y conocidos testigos. Cuenta la historia que una noche estaban cenando en ese lugar el presidente del Tribunal de Justicia de Baja California, un abogado, magistrados y jueces, y que como invitado del presidente estaba en la misma mesa el joven Eligio Valencia López acompañado tan sólo, de un abogado del periódico El Mexicano de apellido –al parecer- Diez. En cierto momento llegó al lugar Jorge Agraz, y de esa mesa lo saludaron.

Por cortesía el presidente del Tribunal le preguntó que si quería sentarse con ellos mientras esperaba a los amigos que dijo que ahí encontraría y Agraz Fitch se sentó de inmediato. Al calor de las copas empezó a criticar al PRI hasta que el abogado perteneciente a ese partido se molestó, ya que además estuvo lanzando indirectas sobre el periódico de los Valencia. Le reclamó su proceder  con un invitado y le dijo que se retirara porque él nada tenía que hacer ahí, además de que era de mal gusto que después de haber sido convidado a acompañarlos los estuviera agrediendo.

Agraz Fitch se negó y le dijo que el presidente del tribunal lo invitó a sentarse y que no tenía por qué irse, por lo que de las palabras pasaron a un intercambio de golpes, y ante el rumbo que tomaron los hechos, el Regidor Valencia decidió retirarse, en tanto que el exfuncionario mandó llamar a los escoltas de la sindicatura que lo acompañaban. Se hizo todo un escándalo, por lo que inclusive llegaron también elementos de la policía municipal a instancias del funcionario.

Según lo que le confiaron al reportero del barrio, los magistrados llamaron directamente al presidente municipal de Tijuana para quejarse de esta situación y le informaron de la actitud agresiva del entonces director de Asuntos Internos de sindicatura, por lo que el presidente municipal ordenó que todos se retiraran.

Inclusive dicen que quienes le dieron una verdadera “zarandeada” a Agraz Fitch, fueron los escoltas del tribunal, al ver cómo los suyos se le fueron encima a los integrantes de esa mesa.

Dicen que ya estando en la oficina principal de Palacio Municipal, hubo algunos que decidieron “cambiar la versión” y culpar al regidor priísta aprovechando que el ayuntamiento de Tijuana “tiene pleito” con el periódico El Mexicano. El problema, afirman es que el exfuncionario “tiene problemas con la bebida”

*- Los intentos de desmentidos

Pues para estar supuestamente interesado el Ejército en desmentir la información extraoficial que ayer manejamos en AFN, sus voceros realmente no mostraron ningún interés por hacerlo, ya que de haber sido así, en las dos ocasiones que entramos en contacto con éstos, de inmediato nos hubieran aceptado la solicitud de que nos enviaran el presumible “desmentido” que ayer Said Betanzos publicó precisamente en El Mexicano, así como en sus propias redes.

Cuando un personaje o un ente público está interesado en hacer una aclaración, lo primero que hace es enviar ésta al medio que lo difundió, y si por alguna razón no lo puede ubicar, pues ya de perdida cuando éste se le pone enfrente aprovecha para decirle: “sí, con todo gusto le envío ese desmentido porque consideramos que trae información errónea”, sin embargo cuando no es así, y eluden hacerlo es porque alguien “operó” la “aclaratoria” por alguna extraña razón.

Hubiésemos entendido si los medios publican una carta o declaración originada directamente por el “ofendido”, pero resulta extraño que esto hubiera surgido de una oficiosa llamada telefónica para tratar de desmentirnos en lo particular, alterando lo que la fuente les señaló  y haciendo creer a su auditorio que -como en este caso- fue el mismo jefe de la institución quien lo emitió, como, tal vez, un favor a quien se sintió ofendido.

También, lo más lógico hubiera sido que el jefe de prensa del ayuntamiento de la ciudad, se hubiese despojado de prejuicios y nos hubiera hablado, sin tratar de regañarnos como en otras ocasiones, para decirnos que en su punto de vista había inexactitudes en lo que publicamos, solicitando incluirlo en esa misma nota informativa, pero por alguna extraña razón evitó hacerlo, como es su obligación. Con todo gusto nosotros habríamos publicado la posición del ayuntamiento en este sentido, porque siempre hemos dicho que aceptamos aclaraciones y respetamos el “derecho de réplica”, sin embargo no lo hizo.

El teniente coronel Dorian Polanco, vocero militar, hizo favor de responder a nuestro llamado y dejó claro que el general Enrique Martínez López no había hablado con ningún medio ni había hecho declaración alguna, ya que se encuentra fuera de la ciudad desde ayer lunes. De hecho prácticamente nos dijo que no tenía mucha información acerca de lo que ocurrió en esa reunión privada y se sorprendió cuando le comentamos que según esta nota informativa él había dicho que fue la síndico Procuradora la que mencionó el tema del caso de corrupción por parte de un colaborador suyo, denunciado por los medios.

Y pretendiendo hacer desmentidos sobre algo que se dijo y que no tendría que ocultarse a nosotros los ciudadanos, dentro del ayuntamiento hicieron todo un “mazacote” tratando de “organizar” una versión que pueda ser congruente, de lo que uno u otro han dicho.

De esta forma un funcionario de gobierno comentó que el general comandante de la zona, preguntó sobre los procedimientos que realiza el departamento de reglamentos del ayuntamiento para saber “cómo operan”.

Otro dijo que más bien fue una advertencia, uno más, un reclamo, otro como que “pintó su raya”, y uno más que “fue tan claro lo que dijo” que no entendía por qué tanto revuelo.

Pero a este mismo revuelo trató de contribuir el Regidor presidente de la Comisión de Seguridad José Vicente Jiménez, quien en una entrevista, de lo poco que se le entendió, aseguró que el general “quien ha andado por toda la Federación” se refería “a que ha visto esas actitudes en otras partes y que no quería que aquí se repitieran”. Jejejeje. 

Pese a todo esto me pareció muy bien que el general Enrique Martínez “no se ande por las ramas” y encare este tipo de situaciones que todos de alguna manera hemos comentado, aunque su intención no haya sido que trascendiera. Y me da gusto porque sólo así actúan las autoridades, como lo vimos ayer que después de cinco días demandaron la renuncia de Agraz Fitch.

Sólo alguien con la representatividad del comandante de la zona militar puede hacer que las cosas se empiecen a enderezar. Bien dijo que ha recibido quejas de algunas personas y también advirtió (ahora van a decir que no advirtió nada) que si no trabajan “derechitos” podrían no contar con el apoyo del ejército.

*.- Inusitada reacción del PAN

Quien también nos sorprendió fue el dirigente municipal del partido de Acción Nacional, Joaquín Palomera Ramírez, ya que no se mostró tibio como otros, lo cual hubiese sido comprensible por ser el presidente del partido en el poder. Ya nos habían dicho que Palomera Ramírez así se las gastaba, y que no era de los que permitían abusos, y lo demostró.

Ayer preguntábamos qué pasaba con el PAN que no había establecido una postura con relación a este caso de corrupción, y aunque efectivamente tardó también cinco días en reaccionar, debemos aceptar que habló como tendría que haberlo hecho el propio alcalde de la ciudad, en lugar de explicar las cuestiones legales, para no fustigar abiertamente a su amigo y colaborador, como ha hecho con los opositores. 

Podrán decir que son solamente palabras, sin embargo Joaquín Palomera aceptó que se trata de un “militante en activo” del PAN, y no dijo como en los frecuentes casos de policías que son encontrados delinquiendo que “ya había sido separado del cargo”. Por esto también señaló que esperaba que le notificara la sindicatura sobre el resultado de sus investigaciones para proceder a poner a este exfuncionario frente a la Comisión de Orden del partido, que podría proceder a su expulsión.

Palomera exigió que este caso se ponga a disposición de la autoridad competente y que las autoridades municipales respondan a todas las interrogantes que la ciudadanía está demandando.

Su llamado a los comerciantes que hayan sido afectados por este exfuncionario u otros, pareció más sincero que los que escuchamos ayer, ya que el presidente del PAN dijo que en este momento “necesitan de su apoyo” para que esta situación no quede impune y para que Tijuana tenga los funcionarios honestos “y pueda ser la mejor Ciudad de México”.

PD.- Créanme que en la actual administración no necesitan de que se les haga una campaña en contra, porque aunque no lo entiendan, todo lo que se ha publicado ha sido resultado de actos o decisiones equivocadas, que han llevado de un escándalo a otro.

PD1.- Ahora sólo falta que también digan que el presidente del PAN Joaquín Palomera Ramírez declaró lo anterior porque “pidió una cantidad millonaria al alcalde durante su campaña, y como no se la dio, ahora está criticando”.

PD2.- El abogado  Carlos Mejía López ha dicho que espera que la audiencia que tendrá mañana, ahora sí, sea pública, por lo que hará esa petición a la síndico Procuradora Ana Marcela Guzmán. A ver si ahora sí llevan una computadora, una impresora, papel, y una secretaria hacia una oficina más amplia.

PD3.- Las autoridades no tendrían que esperar a que los comerciantes afectados denuncien, sino mostrar una verdadera voluntad de acabar con la corrupción, y ante la mínima duda hacer cambios y “leerle la cartilla” a los nuevos encargados, ya que todos estamos en espera de que el presidente municipal cumpla lo que en ese sentido ofreció durante su campaña.

PD4.- Y es que no es fácil que las víctimas hagan su denuncia, por más que así lo crean, ya que desafortunadamente cuando esto sucede luego empiezan las represalias, porque siempre buscan desquitarse de quienes los exhiben o en algunos casos provocan su salida. Si para el que denuncia corruptelas públicamente y le instrumentan “campañas negras” imaginen lo que sucederá con quienes hagan las denuncias penales correspondientes y presenten pruebas.

PD5.- Mejor vamos algo grato y amable: tal y como lo ofreció, el director del Instituto de cultura de Baja California Manuel Bejarano, ya resolvió el apoyo que solicitaba el artista tijuanense Eddy Lizárraga