*. - Bonilla y González responden a Trump
*. - Nuevo enfrentamiento Gobierno-Prensa
DORA ELENA CORTÉS
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TIJUANA BC 6 DE JUNIO DE 2020 (AFN). – Aunque ya está claro que existe una orden de aprehensión para la captura del exsecretario Seguridad Pública de Tijuana y Ciudad Juárez, Julián Leyzaola Pérez, no se le ha podido localizar según se ha visto, no obstante que se afirma que se le ha estado buscando, y si esperaban que se presentara en forma voluntaria -como lo hizo el capitán Gustavo Huerta Martínez- creo que tendrán que ir descartando esa posibilidad
Entre algunos de los que andan tras su pista se afirma que Leyzaola ya es un “prófugo” de la justicia, porque existe esa orden de captura, sin embargo, no obstante, toda la publicidad que se ha dado a este caso, bien podría decir el excandidato a la presidencia municipal de Tijuana que no ha sido notificado, lo que hasta el momento es muy real, porque hasta hoy, al parecer no se le había ubicado.
No han faltado comentarios en el sentido de que Leyzaola, como hombre de honor tendría que presentarse al igual que lo hizo el capitán Huerta Martínez, sin embargo, especialistas del derecho han señalado que muy seguramente el teniente coronel buscará pelear su caso estando fuera de prisión, que quedando encerrado, como ya ocurrió con el ex director de policía municipal y también ex secretario de seguridad pública, que a la vez fue su “segundo de a bordo”.
Por otra parte, las declaraciones que Huerta Martínez hizo ante el juez Tercero de lo Penal no dejaron nadita bien parado a Leyzaola Pérez, ya que prácticamente señaló que efectivamente era afecto a la tortura, y que él era quien directamente sometía a estas prácticas a quienes consideraba sospechosos.
Y mientras quienes lo persiguen manifiestan su confianza de que “en cualquier momento” tendrán bajo arresto al excandidato a la presidencia municipal de Tijuana, también se han dado expresiones a favor del militar retirado, como la que les comentamos del ex síndico panista de Tijuana Marco Antonio González Arenas.
En comentarios hechos en sus redes, además de lo que ya les habíamos platicado González Arenas preguntó que si Leyzaola Pérez, “un hombre que dio resultados en materia de seguridad pública” ¿es acaso para el Estado una amenaza?
Él mismo se respondió diciendo que: “sin lugar a equivocarme (creo) que no es una amenaza Julián Leyzaola para nuestra sociedad. Seguramente lo es para los políticos corruptos que no quieren verlo gobernar y acabando con sus privilegios”. Añade que Leyzaola Pérez: “es una persona de convicciones y valores que jamás ha atentado contra una buena familia mexicana; que lo mueve el interés por ver una ciudad en paz; y que permite “que tus hijos y los niños puedan movilizarse por la ciudad sin la zozobra de ser ultrajados, secuestrados o asesinados”.
Esta posición no la comparten quienes dicen haber sido víctimas del exsecretario, ni tampoco sus familiares, así es que encontramos otras posturas como la del ex Procurador de los Derechos Humanos de Baja California, Raúl Ramírez Bahena, quien aplaudió esta actuación de las autoridades estatales, señalando que con esto “empieza a combatirse la impunidad”. Y a diferencia de quienes preguntan por qué después de 10 años se actúa en este caso, para el defensor de los derechos humanos significa que en los 10 años pasados hubo impunidad.
*. - Bonilla y González responden a Trump
El presidente de los Estados Unidos Donald Trump no encontró ahora a quién responsabilizar de lo que pasa en su país, ni tampoco mejor forma de tratar de recuperar su imagen dañada por los disturbios que se han registrado en el territorio vecino (por el asesinato de George Floyd, a manos de elementos policiacos), que voltear sus ojos hacia el vecino del sur y atacar directamente a Tijuana.
A través de un vídeo que exhibió el presidente norteamericano, Trump aseguró que esta frontera mexicana era la ciudad “con más contagios de COVID 19 en el mundo”, recibiendo una respuesta inmediata del gobernador de la entidad Jaime Bonilla Valdez y del presidente municipal de Tijuana Arturo González Cruz, aunque no vimos un posicionamiento del gobierno federal.
Jaime Bonilla le dijo que mejor se mantuviera calladito “porque así se ve menos feíto”, en tanto que el presidente municipal Arturo González Cruz, más diplomático, señaló que al estadounidense le dieron información equivocada y por lo tanto lo invitaba (ni Dios lo quiera) a visitarnos para que cambie su opinión.
Buscando de nueva cuenta “revivir” el tema de su famoso muro, Trump preguntó a sus conciudadanos: ¿se imaginan las fronteras abiertas, justo ahora? Para luego decir que Tijuana era el lugar más fuertemente infectado en cualquier punto del mundo, en cuanto a la “plaga” que recordó que llegó de China.
Donald Trump, para dejar más preciso su punto, añadió que: el más infectado… uno de los más infectados en este justo momento en la frontera, era precisamente Tijuana, por lo que insistió en que construirán el muro, del que ya tienen -dijo- más de 320 km construidos. Ante eso, a través del Twitter (que es la red que gusta al norteamericano), el presidente municipal señaló entender su posición, considerando que: “el vecino país es la nación con más fallecidos por COVID 19, y que actualmente enfrenta fuertes protestas en más de 50 ciudades”.
Señaló que por eso entiende que Donald Trump busque distraer la atención “teniendo un proceso electoral en puerta”, por lo que ahora -lamentablemente- le tocó Tijuana. Por eso González Cruz le extendió la invitación para que así pudiera constatar “que le dieron información incorrecta”.
Por su parte el gobernador de la entidad al ser cuestionado durante su presentación mañanera señaló que “el señor Trump, solo ve paja en el ojo ajeno, y no considera la viga en el propio; calladito se ve menos feíto”
Y luego le echó en cara que Estados Unidos, es el país con más casos y defunciones en el mundo por el COVID-19, y que pese a eso: “Solo le dio por voltear al otro lado del cerco, y echar culpas, pero la realidad es que las personas contagiadas en nuestra región -asentó- son por todos aquellos que trabajan en la Unión Americana, y que le generan riqueza". Pácatelas.
Esto es muy cierto, porque a Donald Trump se le olvida que ordenó que cerraran las puertas para todos aquellos que no somos ciudadanos, ni residentes, ni tampoco trabajadores esenciales para ellos, y que por otras cuestiones como: visitas turísticas, médicas, de estudios y muchas más, solíamos cruzar la frontera con mucha frecuencia sin crearles problemas, y apoyando su economía. Además, también se le olvida que definitivamente hay muchísimos más infectados y muertos de aquel lado de la frontera, que del nuestro, por lo que muchos estadounidenses buscan quedarse por acá para darle la vuelta al virus.
*. - Nuevo enfrentamiento Gobierno-Prensa
Un nuevo enfrentamiento reventó entre gobierno del Estado y reporteros de Tijuana, a raíz del desmentido público que esta mañana se hizo durante la transmisión en vivo del gobernador Jaime Bonilla Valdez, de una nota que la corresponsal del periódico Reforma publicó recientemente, señalando que en Baja California “se escondía el número de muertos” como consecuencia del Covid 19.
Esto, por lo visto molestó sobremanera al gobierno de Bonilla Valdez que respondió a través, no solamente del propio mandatario estatal, sino también en voz de los secretarios de Salud Alonso Pérez Rico, y Amador Rodríguez Lozano, de Gobierno.
Creo que ambas partes tienen cierta razón en este zipizape que se está dando, y que se agrava por el hecho, de que en lo que va de la administración, no se ha podido llegar a un entendimiento entre los dos sectores, no obstante que antes de la pandemia, ya convivían la prensa y funcionarios del gobierno Estatal, incluido el gobernador Bonilla, en una aparente armonía.
Desde que llegó Jaime Bonilla Valdez al gobierno de Baja California, algunos reporteros -e inclusive representantes de medios- no sólo mostraron, sino manifestaban públicamente que el morenista no era de su agrado, y los descalificativos hacia su persona eran muy frecuentes.
Y Jaime Bonilla no se quedaba atrás, ya que también dejaba en claro su animadversión hacia una buena parte de los reporteros, que en mucho de los casos “ni vela tenían en ese entierro”, y a los que inclusive respondía de una manera muy tajante, en un estilo muy diferente al de los anteriores gobernadores, que, por lo mismo, nos ha llevado tiempo entender y aceptar.
Ya con la crisis del coronavirus encima, como que la sensibilidad subió de tono en todos, y mucho de esto, por el desconocimiento de ambos sectores sobre el trabajo de la parte contraria.
Por una parte, los funcionarios del gobierno estatal se sienten agredidos y no comprenden que -aparentemente- no se entienda el trabajo y el esfuerzo que realizan para tratar de enfrentar esta crisis, con el menor número de muertos posible, y por el lado de la prensa, otros no entienden -o no entendemos- que no se den cuenta que nuestra labor también conlleva riesgos y que no por nuestro gusto se anda tras de los funcionarios, sino porque en ocasiones, quedan preguntas sin responder, o qué no nos parecen lo suficientemente claras, y de aquí el enfrentamiento.
Y esto, debo aceptar que no ocurre con AFN, donde, por el contrario, cuantas veces hemos solicitado información se nos ha proporcionado, provocando que algunos no lo entiendan y también nos agredan a nosotros, aunque en ocasiones tampoco encontremos respuesta o debamos pasar horas, buscando al funcionario adecuado. Pero… esa es otra historia.
Creo que este no es momento para estarnos atacando unos y otros, cuando -como siempre ha sucedido- vamos unos “lado a lado”, cada quien guardando su lugar y entendiendo su labor, porque todo aquello que se salga de lo común, y que afecte a la sociedad -de una o de otra forma- lo tienen que enfrentar -y resolver- las autoridades, en tanto que como prensa, nosotros debemos de estar presentes para ser el vínculo mediante el cual se informe la comunidad, pero no sólo eso, sino también para documentar lo que ocurre, para las generaciones venideras.
La corresponsal del periódico Reforma justificó su publicación diciendo que buscó declaraciones oficiales, y al no obtenerlas publicó la información que tenía a la mano, en tanto que el gobernador respondió, que, si bien es cierto que no le cumplieron con una entrevista, si es que se la ofrecieron -dijo- eso no justificaba para (que en su punto de vista), mintiera al decir que se estaban escondiendo las cifras reales de muertos, en Baja California.
Y como les decía: ambos tienen parte de razón, y parte de responsabilidad, porque es cierto que no hubo la respuesta oficial para orientar y explicar lo que estaba sucediendo, pero también es cierto que se hizo una afirmación subjetiva, por lo menos en la cabeza de la nota (que eso no lo hace la reportera) al señalar que se escondía a los muertos.
Lo que sí quedó debidamente documentado, y que ha sido tomado como una intención de bloquear el derecho a la información, es el oficio que por instrucciones del secretario General de Gobierno Amador Rodríguez Lozano (porque así lo reveló él mismo), envió la directora del registro civil en Baja California, Paloma Guadalupe Alegría Murrieta, a los oficiales de las oficinas similares en los cinco ayuntamientos, para que se abstuvieran de dar declaraciones a los medios.
Y es que, como efectivamente lo dijo, no se afirma en forma textual que se le niegue a la prensa la información pero se sobreentiende que así es, porque no hay otros sectores interesados en que se den declaraciones formales al respecto, además de que Rodríguez Lozano habló -específicamente- sobre declaraciones periodísticas, que por lo menos daba la oficial del Registro Civil en Tijuana, Magaly Ronquillo Palacios.
Creo que todos entendemos perfectamente la intención de esa instrucción, debido a que efectivamente pudiesen surgir confusiones al darse cifras sin ton ni son, y al no estar debidamente explicadas por los responsables del área, sin embargo, qué les costaba haber agregado otra instrucción, en el sentido de que, de recibir peticiones en ese sentido se dirigieran a algún vocero calificado, que pudiera dar respuesta, para que esto no se tomara como una cerrazón a la información.
Y mientras el secretario de salud Alonso Pérez Rico trató de ser más diplomático y cuidadoso en el tema, al no mencionar ni al periódico ni a la reportera, aunque también hizo sus críticas (entendibles en su caso, como técnico de la medicina), luego vino el secretario General de Gobierno (¡No… otra vez Amador!) que, de un plumazo, levantó al gremio en “pie de guerra”, por la forma en la que hizo el desmentido a la reportera.
Luego puso las “banderillas” Bonilla, y con su estilo le instó a que “no mintiera” y volvió a profetizar que por eso luego los reporteros pierden su credibilidad y les “lanzan un huevo a la cara”. Entre paréntesis, no he logrado descifrar el significado exacto de esa frase, que ya la ha soltado por lo menos dos veces, aunque claro que creo entenderla. Y de ahí ¡estalló la bomba!
Pero esto que es algo a lo que ya nos han acostumbrado funcionarios de todos los gobiernos, y que normalmente se ha dado en la “refriega” diaria entre ambos sectores, es una situación que prácticamente nunca llegaba a los espacios periodísticos, porque se tomaba como “gajes del oficio” y siempre se dirimía en cada encuentro.
Lo que sí me parece preocupante, al margen del desmentido, ahora en vivo y a todo color, es la intromisión abierta que aceptó haber hecho el Secretario General de Gobierno, al pedir a la directora del Registro Civil en el Estado, que enviara esas instrucciones, cuando si mal no recuerdo (y por favor aclaren si estoy mal), estos funcionarios dependen de los gobiernos municipales, donde la cabeza es cada alcalde.
Y no sólo eso, sino la manera como exhibió a esa funcionaria, y la forma sarcástica en que se refirió a ella, al decir que le gusta mucho hablar, o sea, irse de la boca, y todavía más, referir a manera de descalificación que emitía opiniones personales, que según dijo, confundían más.
Y me pregunto: ¿no pudo hablarlo en forma directa con el presidente municipal, en este caso, el de Tijuana? Haber hablado para sugerirle -de manera diplomática- como corresponde a su cargo, el que sugiriera, a su vez, a su funcionaria, tener más cuidado con ese tipo de comentarios.
Porque, así como a él no le gusta que le señalen este tipo de errores, que con su cargo y vasta experiencia ya no debería de tener, mucho menos le debió haber gustado a la oficial del Registro Civil que la expusiera esa manera. En fin, parece que son las nuevas formas, en los nuevos tiempos.
Lo que sí espero, es que el nuevo enfrentamiento entre prensa y el gobierno estatal se resuelva sin mayores confrontaciones, porque “el horno no está para bollos”.
PD. - Los gobernadores de los estados de Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, y Tamaulipas, enviaron una carta al pasado 5 de este mes al presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, sobre el tema de la pandemia que afecta a todo el país, como al mundo.
PD1.- Estos mandatarios estatales, señalaron, que la crisis que vivimos: solamente podrá ser contrarrestada si es enfrentada por todas las fuerzas del Estado mexicano, considerando que el coronavirus tiene a México -dijeron- al borde de una de las crisis más profundas, tanto por sus impactos en la salud, como por las graves consecuencias económicas que vivirán amplias regiones del territorio nacional, y por los daños sociales que empiezan a sufrir -ya- amplias mayorías en el país.
PD2.- Los gobernadores le manifiestan al presidente, que están atentos para enfrentar estas crisis, sin embargo -advierten- que sus recursos son escasos, por lo que consideran urgente y necesario “establecer un diálogo franco, real, y abierto con él, en los próximos días, en favor de los Estados y de México.
PD3.- Señalan que su preocupación es legítima, ante el gran reto que representa la epidemia del coronavirus, sobre todo, porque -hasta el momento- el presidente les ha mandado decir que para eso están la secretaría de Gobernación, y otros funcionarios, en tanto que él sigue su programa, en el que su prioridad son las giras por el país.
PD4.- Y no es por darles por su lado a los gobernadores -que son de oposición al presidente- pero sinceramente me resulta difícil entender que don Andrés Manuel López Obrador no vea la importancia de sostener diálogo directo con ellos, en lugar de viajar por el país, considerando que, efectivamente, nuestra principal necesidad es combatir esta crisis sanitaria y sus terribles consecuencias. Además de que la oposición siempre existirá y deben aprender a convivir con ésta.
PD5.- Muy seguramente dirán que los gobernadores sólo buscan reunirse con él para enfrentarlo y exhibirlo, sin embargo, todo dependerá de la habilidad del tabasqueño para sacar adelante estos retos, porque si bien es cierto que hay otros funcionarios que lo pueden representar, y que son los encargados -directamente- de los diferentes trabajos, no es lo mismo acordar con ellos, que hacerlo con el presidente de México.
PD6.- De hecho, en fechas recientes se celebró otra videoconferencia encabezada por la secretaria de Gobernación con los gobernadores del país y con la asistencia de varios funcionarios de primer nivel, y por lo que dicen, las discusiones estuvieron fuertes, y para algunos sólo se trataron de críticas y ataques hacia el presidente.
PD7.- Lo que pasa aquí, como en todos los casos, es que ninguna de las partes quiere bajar la guardia, y cuando se encuentran se ven con desconfianza -y como enemigos- y eso, en el país no nos traerá ningún buen resultado, sobre todo en esta situación que vivimos.
PD8.- Por cierto, en el reporte mañanero de este día, de Jaime Bonilla Valdez (en el que hubo de todo), el gobernante aprovechó para destacar lo que el presidente de México dijo acerca del dirigente Nacional de Morena, al que el primer mandatario de la nación le dio una fuerte desconocida, por haberlo criticado en su “cruzada” a favor de la austeridad.
PD9.- Como les decía, Morena está muy dividida, y hay enfrentamiento entre el grupo que encabeza el presidente de la república, y el que tiene al frente al actual dirigente nacional de Morena, por lo menos así se sigue presentando, Alfonso Ramírez Cuéllar.
PD10.- Y ese enfrentamiento entre grupos, también se repite aquí en Baja California.