Bajo amenazas, Velázquez pasó droga
Agencia Fronteriza de Noticias
Programas Dora
Programas Villegas
Translate this website into your desired language:

Bajo amenazas, Velázquez pasó droga

TIJUANA, BC - martes 27 de noviembre de 2012 - AFN.
6613

 

TIJUANA BC 27 DE NOVIEMBRE DE 2012 (AFN).- El arquitecto Eugenio Velázquez Bustamante, quien enfrenta un proceso en el vecino país, por intento de cruzar droga a Estados Unidos reveló que lo hizo como resultado “de una situación de alto riesgo, amenaza e intimidación”.

  En un comunicado enviado a la Agencia Fronteriza de Noticias, el reconocido profesionista no niega la información publicada en días pasados en AFN, sino que por el contrario advierte que fue una víctima más de la lucha contra el crimen organizado que se desarrolla en el país y como consecuencia de ser “un residente fronterizo”.

  Sin explicar a fondo qué fue lo que le motivó para llevar casi seis kilos de cocaína en un vehículo que manejaba, dijo que “involuntariamente” se vio involucrado en esa situación jurídica en Estados Unidos “por el tráfico de drogas desde México, vía la frontera con San Diego”, como “se dio a conocer recientemente en algunos medios de comunicación” (AFN y The San Diego Union).

 Su mutismo en cuanto a revelar las causas que lo llevaron a proceder de esta manera explicó que es “por estrategia de mi abogado”, mediante el cual emprendió una defensa legal, que, fuera de los sistemas penitenciarios y acorde al sistema judicial de Estados Unidos y sus procesos “me permita retomar mi vida regular al lado de mi familia lo antes posible”.

  Velázquez, autor de obras como la Nueva Catedral en la Zona del Río; el Centro Estatal de las Artes y el Cubo del CECUT, dijo que lo que le ocurrió a principios de marzo pasado “no se puede entender fuera del contexto de la lucha contra el crimen organizado y sus consecuencias para los ciudadanos”.

  Las víctimas de esta situación, dijo, no son sólo los muertos que se cuentan por miles ni sus dolientes,  sino que “somos también personas que tenemos la desgracia de llamar la atención de quienes nos consideran presas fáciles de sus objetivos, lo que ha sido devastador, tanto para mí como para los míos”.

  Velázquez asegura que previo a lo que llama “desafortunado incidente”, jamás quebrantó la ley de ningún país y que tampoco sufre de problemas de adicción de ningún tipo.

 Luego reflexiona en que: “Si lo que me sucedió (y le sigue sucediendo a muchas personas) es el resultado de vivir en esta región fronteriza en donde el tráfico de armas, drogas y personas es la constante, me considero afortunado, pues a pesar de haber perdido tanto, aun preservo el don más preciado, mi vida”.

  Frente a todo esto, “con completa humildad” ofreció “una disculpa pública a todos aquellos que se sientan defraudados, a mis maestros, colegas, amigos y parientes; especialmente pido perdón a todos los jóvenes que algún día me vieron como un ejemplo. No puedo más que decirles a todos ustedes, que jamás imaginé que estaría inmerso en esta realidad, pues nadie en su sano juicio arriesgaría una carrera de 30 años, ni a una familia como la mía, si no se viera en una encrucijada”.

  Advirtió que quienes han perdido a un ser querido a manos del crimen o que han caminado “en estos zapatos desgastados por el flagelo del miedo y la impotencia” le obsequiarían sin titubeos, su confianza y amistad. Al resto pidió “el beneficio de la duda, antes de que me condenen”.

Aquí el texto completo de la carta:                                                                                                                                              

Tijuana, B.C. 27 de Noviembre del 2012

A la opinión pública, a mis alumnos universitarios, amigos y queridos familiares:

Como se dio a conocer recientemente en algunos medios de comunicación, me encuentro involuntariamente involucrado en una situación jurídica complicada en Estados Unidos por el tráfico de drogas desde México, vía la frontera con San Diego.

Lo que me sucedió a principios de marzo, no se puede entender fuera del contexto de la lucha contra el crimen organizado y sus consecuencias para los ciudadanos. Las víctimas de esta situación no son solo los muertos que se cuentan por miles, ni sus dolientes, somos también personas que tenemos la desgracia de llamar la atención de quienes nos consideran presas fáciles de sus objetivos, lo que ha sido devastador tanto para mí como para los míos.

Por estrategia de mi abogado, emprendí una defensa legal en el que, fuera de los sistemas penitenciarios y acorde al sistema judicial del vecino país y sus procesos, me permita retomar mi vida regular al lado de mi familia lo antes posible.

Por lo anterior y mientras el caso no se desahogue del todo, no me es permitido contarles más; pero lo que si les puedo decir, es que previo a este desafortunado incidente, jamás quebrante la ley de ningún país, que no sufro de problemas de adicción de ningún tipo y que mi compromiso para mis clientes y empleados ha sido total y con la convicción de hacer el bien en todo momento.

Mi vida se ha dividido siempre entre mis tres pasiones: mi ciudad, la arquitectura y mis seres queridos, con los que a lo largo de todo este tiempo, he construido una vida llena de retos y satisfacciones, en los que siempre me he sentido como uno de los tantos hijos consentidos de esta ciudad. Soy, según mi propia definición, un hombre fruto de la cultura del esfuerzo, que se ha ganado cada centavo que ha devengado.

He formado una hermosa familia con mi bella e inteligente esposa y mis dos hijas.

He colaborado siempre de manera honoraria con diversas organizaciones de la vida cultural, religiosa, profesional y de derechos humanos, incluyendo mi querido Colegio de Arquitectos de Tijuana.

Con mi Tijuana, he procreado tres hijos: El Centro Estatal de las Artes del Parque Morelos, El Museo del Cubo del Centro Cultural Tijuana y mi amada Catedral Metropolitana.

Tengo, además,  una gran satisfacción al haber tenido el privilegio de enseñar la cátedra de arquitectura en una de las universidades más prestigiadas de esta ciudad, y  gracias a pláticas y conferencias, compartir mis conocimientos con cientos de jóvenes en todo el Estado.

Desafortunadamente, todo esto no ha sido suficiente para proteger a las mujeres de mi vida que han sido las más afectadas en este trance y por ellas,  les ruego que la mantengan en sus oraciones.

Si lo que me sucedió (y le sigue sucediendo a muchas personas) es el resultado de vivir en esta región fronteriza en donde el tráfico de armas, drogas y personas es la constante, me considero afortunado, pues a pesar de haber perdido tanto, aun preservo el don mas preciado, mi vida. 

Agradezco las muestras de apoyo incondicional y cariño de aquellas personas que me conocen lo suficiente para saber que mis acciones fueron el resultado de una situación de alto riesgo, amenaza e intimidación. Saben que soy un optimista incorregible que cada mañana me digo al espejo, tengo vida, salud, esperanza, una familia por quien luchar y una fe inquebrantable.

Por lo anterior y con completa humildad es que pido una disculpa pública a todos aquellos que se sientan defraudados, a mis maestros, colegas, amigos y parientes; especialmente pido perdón a todos los jóvenes que algún día me vieron como un ejemplo. No puedo más que decirles a todos ustedes, que jamás imagine que estaría inmerso en esta realidad, pues nadie en su sano juicio arriesgaría una carrera de 30 años, ni a una familia como la mía, si no se viera en una encrucijada.

Quienes hayan perdido a un ser querido a manos del crimen o que hayan caminado en estos zapatos desgastados por el flagelo del miedo y la impotencia, me obsequiarían sin titubeos su confianza y su amistad. A los demás, les pido el beneficio de la duda antes de que me condenen. El proceso legal esta en camino, y espero pronto que concluya satisfactoriamente para mi y mi familia.

Atentamente

Eugenio Velázquez Bustamante

Arquitecto y Padre de Familia, Tijuanense comprometido

Ayuntamiento Noviembre 11 2023
La favorita
Matemáticas Fáciles
Pagina Facebook
AFN Marketing
La Marina solicita apoyo
Buscador Acerca de AFN Ventas y Contacto Reportero Ciudadano